El propósito de una CVT, o transmisión continuamente variable, es proporcionar una entrega de potencia eficiente y fluida ajustando continuamente la relación de transmisión para hacer coincidir la velocidad del motor con la velocidad del vehículo. Esto permite que el motor funcione con su eficiencia óptima, independientemente de las condiciones de conducción, lo que resulta en una mejor economía de combustible y una aceleración más suave.
Las transmisiones CVT ofrecen varias ventajas sobre las transmisiones automáticas o manuales tradicionales. En primer lugar, brindan una experiencia de conducción más suave porque no hay cambios bruscos. Esto mejora la comodidad de los pasajeros y reduce el desgaste de los componentes de la línea motriz. En segundo lugar, las CVT ahorran más combustible porque pueden mantener el motor funcionando de manera más consistente en su rango de velocidad más eficiente que las transmisiones tradicionales. Finalmente, las CVT brindan un mejor rendimiento al ofrecer una gama más amplia de relaciones de transmisión, lo que permite una aceleración rápida cuando sea necesario.
Las transmisiones CVT se utilizan comúnmente en automóviles de pasajeros, especialmente en vehículos diseñados para desplazamientos urbanos y conducción en carreteras. También se encuentran en vehículos híbridos y en algunas motocicletas de motor pequeño. Su eficiencia y funcionamiento suave los hacen muy adecuados para aplicaciones donde la economía de combustible y la comodidad son prioridades.
