La ventaja de aprovechar un transformador es que permite ajustar el voltaje de salida del transformador para que coincida con los requisitos de carga y las variaciones variables en el voltaje de entrada. Esta capacidad mejora la eficiencia y confiabilidad del sistema de distribución de energía al mantener un nivel de voltaje estable a pesar de los cambios en la demanda o el suministro.
La intervención garantiza que los equipos y dispositivos que reciben energía funcionen dentro de su rango de voltaje óptimo, protegiéndolos de daños debidos a sobre o bajo voltaje.
La derivación se utiliza en transformadores para regular el voltaje de salida. Al ajustar el número de vueltas en el devanado a través del cual fluye la corriente, la derivación puede aumentar o disminuir el voltaje de salida según sea necesario. Este ajuste es crucial para compensar caídas o aumentos de tensión en la red de distribución de energía.
La derivación es particularmente importante en áreas con demanda de energía fluctuante o líneas de transmisión largas donde los niveles de voltaje pueden variar significativamente, lo que garantiza que los consumidores reciban un suministro de voltaje constante.
Las desventajas de cambiar transformadores de TAP incluyen una mayor complejidad, requisitos de mantenimiento y posibles problemas de confiabilidad.
El mecanismo de cambio de tomas agrega piezas móviles al transformador, que pueden desgastarse con el tiempo y requerir un mantenimiento regular para garantizar un funcionamiento adecuado. Además, los cambiadores de tomas operados por carga (OLTC), que permiten el ajuste de voltaje sin interrumpir la energía, pueden introducir más puntos de falla y generalmente son más costosos.
También pueden haber picos transitorios de voltaje durante el proceso de cambio de grifo, lo que podría afectar equipos sensibles.
El propósito de la modificación de tomas en transformadores de potencia es ajustar el voltaje de salida del transformador para satisfacer diferentes demandas de carga y compensar las variaciones de voltaje en la red de suministro. Este ajuste ayuda a mantener un nivel de voltaje estable en todo el sistema de distribución de energía, mejorando la eficiencia y confiabilidad del suministro de energía.
Al utilizar cambiadores TAP, las empresas de servicios públicos pueden optimizar los niveles de voltaje para reducir las pérdidas, administrar la distribución de carga de manera más eficiente y garantizar que los usuarios finales reciban un voltaje constante y apropiado para sus necesidades.